OBRA:MUCHACHA JUGANDO CON SU PERRO EN LA CAMA DE JEAN HONORÉ FRAGONARD


MUCHACHA JUGANDO CON SU PERRO EN LA CAMA



La obra “Muchacha jugando con su perro en la cama” es muy similar a la obra “Chica jugando con su perro”; las cuales, pertenecen al pintor francés Jean Honoré Fragonard (Grasse,  el 5 de abril 1732- París, 1806) quien fue discípulo de Jean Baptiste Simeon Chardin y de  Francois Boucher, en 1752 obtuvo el gran premio de Roma. Estudió  en Italia a los grandes maestros del Renacimiento y, en especial, a su contemporáneo Giovanni Battista  Tiépolo donde recibió la influencia del maestro veneciano.

Fragonard es uno de los mayores representantes de la pintura del siglo XVIII. Su estilo fogoso, pleno de desenvoltura, y su vivísima sensibilidad se expresan con la misma facilidad en las escenas galantes o morales que él emitía en  los retratos y en las composiciones o escenas de costumbres. La Revolución puso fin a la demanda de obras del género galante y los últimos años de su vida transcurrieron en la miseria, murió en la pobreza el 22 de agosto de 1806 en París. Este artista resume en su obra las aspiraciones del siglo XVIII, con sus contrastes y contradicciones.
El contexto en el que se desenvuelve este pintor francés  es en el periodo rococó; donde se destacó como artista favorito de la corte del Luis XV y Luis XVI por su desarrollo de escenas amorosas en donde tenía lugar los colores delicados, expresados en jardines.

Al principio Fragonard desarrolló un estilo acorde con la temática religiosa e histórica. Sin embargo, después de 1765 siguió el estilo rococó, que entonces estaba de moda en Francia. Las obras de esta última época, que son las más conocidas, reflejan la alegría, frivolidad y voluptuosidad del periodo. Se caracterizan por la fluidez de líneas, las vaporosas flores en medio de un suave follaje y las figuras con poses llenas de gracia y elegancia, normalmente de damas con sus amantes o de campesinas con sus hijos. Entre sus obras más significativas, se destacan: La lectora, 1770–1772 .The National Gallery of Art at Washington, El columpio. The National Gallery of Art at Washington, El beso robado. Óleo sobre lienzo. 45 x 55 cm. Museo del Hermitage. San Petersburgo. Rusia, Las Bañistas, 1765. Lienzo. 64 x 80 cm. Museo del Louvre. París. Francia, Joven jugando con un perro Fondation Cailleux, Paris.


DESCRICIÓN DE LA OBRA: EROTISMO AL ROCOCÓ.


Obra        : Joven jugando con un perro / Chica en cama con un perro.
Pintor      : Jean-Honoré Fragonard
El medio : Oleo
El estilo  : Rococó
Tema       : Mujeres

Chica en cama con un perro  es un trabajo del artista famoso, Fragonard, Jean Honoré. Dibujado hacia 1765-1772(óleo sobre lienzo de medidas 70 x 87cm)  usando el aceite en técnica de la lona y ahora está situado en el gran  museo de pintura antigua, Alte Pinakothek - Alemania. El estilo rococó, es lo que se entendía por audacia en tan decadentes y corruptas cortes de Luis XV y Luis XVI. Se llamaba género “galante” y recuerda, por su inclinación a la decoración, a la célebre porcelana francesa.

A su regreso a París, se dedicó a la pintura de temas galantes y sentimentales, con los que alcanzó un éxito extraordinario. Entre sus obras, se destaca la serie de pinturas que le encargó madame du Barry -amante oficial de Luis XV- para decorar su palacio, conocidas como “Los progresos del amor en el corazón de las jóvenes”.


Estas obras, son unas jovencitas que duermen sobre una gran cama; cuando no hay Cupido, el pintor se sirve de un travieso perro, como en «Joven sobre un lecho jugando con un perro». El perro es ya un tópico en la pintura rococó. Cuando no hay un cupido, lo que anteriormente se mencionaba, que desempeña el papel de intermediario entre el espectador y el objeto deseado, el pintor se sirve de un travieso animalito, generalmente un perro ( de un gato o una palomita también), esto resume a Fragonard cuando pinta a una niña en la cama jugando con su mascota. Todos son perritos más o menos eróticos.
ELECCIÓN DE LA OBRA


Es una obra que puede ser bastante controversial debido a la manera en que se encuentra la joven “jugando con su perro”, por que es evidente que no está jugando inocentemente o tal vez sí, pero sentimos que hay una clara intención de zoofilia. Es algo que a los ojos de cualquiera podría ser ciertamente impactante, por que al ver a un perrito que no razona, de alguna manera está siendo utilizado para generar una masturbación, es realmente abrumador. Es una obra complicada que se ve muy simple.

Podría decirse que el eros no es más que un estado natural del ser humano, que a lo mejor para muchos ha sido un tema no muy aceptado pero que a la final se quiera o no se quiera, existe y existirá mientras haya diferencia. 
Lo erótico puede llegar a convertirse en algo fundamental para algunas personas, pues es un estado de satisfacción o de placer desde otras perspectivas, es un "quitarse las vendas", tapujos, prejuicios y aventarse a realizar actos diferentes o exagerados o simplemente actos pensados de múltiples maneras.
Cuando el ser humano es creativo en todos sus sentidos, es muy probable que le aburran las mismas cosas, los mismos espacios, costumbres, acciones, compañías etc. por lo mismo se inventa ciertas maneras de recrearse o de volver a experimentar los mismos actos pero desde puntos absolutamente diferentes.
                                                                                                                    
Esta exploración del cuerpo de la niña, es examinado a través del otro, en este caso del perro, que no cumple la funcionalidad de tiempos pasados, donde el animal era un símbolo de representación sobre piedras, ahora hace parte de esa curiosidad de la mujer con su esencia misma, de ser emocional , sensual y pícaro. Esta obra es erótica, debido a su contemplación estética, a sus colores diversos, a las texturas sutiles y brillantes, es esa intensificación de la interpretación la que hace que la obra sea  construida bajo parámetros de sensualidad e inocencia; las piernas, son un fetiche que muchos hombre y mujeres pueden encontrar en esta pintura, los senos totalmente descubiertos causa sensación de observación al saber que son de una mujer joven, las cintas de seda que se desprenden dan ligereza  y movimiento en la imagen.
La obras de Jean-Honoré Fragonard, Joven jugando con un perro y Chica en cama con un perro, son elegidas debido a su similitud en la composición, en colores, en la pose de la modelo; es por ello, que se trabajaron las dos obras, pero reinterpretándolas en una sola  con  la misma esencia. La elección, fue llevada a cabo, por la impactante pose que tiene la modelo con el perro entre las piernas, que al mismo tiempo, dan sensación de coquetería, y como se mencionó inicialmente, un tinte de zoofilia; esta forma expresiva, que emite la pintura, y su alta condensación de telas superpuestas, son las que nos motivó a escoger esta obra y llevarla al plano de la reinterpretación.
La prioridad de seleccionar la obra, fue la modelo niña, pues, nos gusta mucho este etapa, y marca una distinción entre muchos desnudos de la historia, aunque no sea una obra tan conocida; el llevar, siempre una mujer adulta al desnudo, es muy común, pero llevar a una joven al desnudo es un choque en la actualidad, porque empieza la dualidad entre lo pedófilo y lo realmente estético, y queríamos hacer énfasis en la dulzura que expresa ella en su mirada, además, de sus prendas abollonadas, pueden darnos un aire de que Eros está en ella, en su personalidad, en su sentimiento de belleza, en su diversión a solas en la cama, en su intimidad, este no está ausente, está representado en su mascota, a quien ella le expresa los sentimientos banales  del propio ser en búsqueda de su propia sensualidad, sexualidad y diversión en el camino de la pubertad, de la edad de experimentación, de la edad más contemplativa por el ser humano. 

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